Objetivo: Reflexionar que la oración es un simple “buscar a Dios” en todos los ámbitos de la vida.
Acostumbrarnos a buscar la Presencia de Dios implica que le busquemos
siempre:
•
Mirar que nos mira: en esta vida, en estos acontecimientos, en este rato en que
estás navegando en la red… Dios está contigo justo ahora.• Acostumbrarnos a traerle presente y a buscarle en todo: en los días cotidianos, en los ratos de esparcimiento, cuando salgo con mis amigas y amigos, cuando voy a cine, en un domingo familiar, en la Eucaristía, en la capilla, cuando escucho música, en el Facebook con mis amigos.
Santa Teresa dice: “ACOSTUMBRAOS, ACOSTUMBRAOS A TRAERLE PRESENTE SIEMPRE”
Traduciendo al lenguaje de hoy sería: Habitúate, acostúmbrate a hacerte consciente de que Dios está en cada instante de tu vida”
Digamos ahora juntos/as como una verdad de nuestra fe, recordarlo, activarlo, decírnoslo una y mil veces:
ÉL ESTÁ AQUÍ,
ESTÁ EN MÍ, ESTÁ EN TI, ESTÁ EN TODO Y EN TODOS…
NADA NI NADIE TE PUEDE SEPARAR DEL AMOR DE
DIOS, PERO SOBRE TODO, NADA NI NADIE PUEDE
SEPARAR A DIOS DE TI.